Las semillas se han convertido en uno de los mejores complementos para ensaladas, desayunos o incluso solas como snacks y es que por sus ricas cantidades en vitaminas, minerales y proteínas vegetales entre otras son consideradas como superalimentos.
Estas se pueden consumir de diferentes formas: crudas, en puré y hasta molidas. Es recomendable consumirlas preferentemente sin azúcar ni sales añadidas. Debido a su gran versatilidad a la hora de consumirlos y sus grandes beneficios para la salud te recomendamos diferentes semillas para que puedas variar.
- Semillas de sésamo
Las semillas de sésamo son una de las principales fuentes de calcio convirtiéndolas en la perfecta alternativa al consumo de lácteos. Son ideales para mantener los huesos fuertes y sanos. Además de estos beneficios también contienen vitaminas B1, B3 y B6 que ayudan a la producción de glóbulos rojos que mejoran las defensas. Por otro lado, el zinc y el magnesio que contienen aportan energía frente al agotamiento físico y mental.
Desde hace un tiempo estas semillas comenzaron a incluirse en el pan con lo que ganaron cierta presencia, pero ese no es su única forma de ser consumidas puesto que además de poderse consumir en snacks también son ingredientes básicos en platos como el tahini frecuentemente consumida en Japón
- Semillas de Chía
Las semillas de chía se han popularizado durante los últimos años especialmente por sus propiedades y es que es una de las pocas fuentes de proteína vegetales que contiene todos los aminoácidos esenciales.
Son ricas en omega 3, una grasa considerada saludable para las funciones cerebrales y cardiacas. Favorece el sistema digestivo y también incluyen proteínas y antioxidantes, mejora el tránsito intestinal y es una fuente natural de energía. Posee un efecto desinflamatorio y es rica en magnesio y zinc, dos minerales esenciales para el buen funcionamiento del sistema inmunológico.
- Semillas de girasol
Estas semillas son muy populares, ya que son consumidas tanto solas, como en ensaladas y en snacks
Éstas aportan una gran cantidad de ácidos grasos como el omega-6 , reducen el colesterol malo y mejoran la salud cardiovascular. Son una fuente natural de energía recomendado para personas que realiza deporte con frecuencia. También mejoran el funcionamiento del sistema nervioso y contienen ácido fólico que ayuda a mejorar su desarrollo.
- Semillas de Calabaza
Las semillas de calabaza son ricas en aminoácido, siendo una buena fuente de proteínas vegetales. Contienen también vitaminas del complejo B, ácido grasos y minerales como el zinc o el magnesio.
Funcionan como un antiinflamatorio que ayuda también a limpiar el organismo. Reducen el colesterol en la sangre y aportan una sustancia llamada L-triptófano que se considera un antidepresivo natural.
Por otro lado, hay que recalcar que estas semillas proporcionan un aminoácido vital para promover la liberación de serotonina, el cual es un elemento involucrado en el sueño y el placer. En otras palabras, estas semillas pueden ayudarte a estar de mejor humor y a dormir mejor.
- Semillas de Lino
La semilla de lino también conocida como linaza es rica en fibra y ácido omega. La linaza es muy beneficiosa para el cuerpo. Aporta una gran cantidad de hierro, zinc y selenio, lo que la hacen una opción ideal para las personas con anemia o desnutrición.
Además, las semillas de chía son una buena fuente de omega 3, proteínas y fibra vegetal. Incluyen unos antioxidantes llamados lignanos, que contribuyen a la buena salud del corazón. Y no solo eso, un estudio realizado por científicos de la Universidad de Copenhague determinó que una pequeña dosis de semillas de lino tiene un efecto significativo en la reducción del apetito y en el consumo de energía, por lo que puede ayudar a perder peso.
