Si por un momento cierras los ojos y piensas en un paraíso natural, seguro que a tus retinas acuden miles de imágenes de playas espectaculares. Hoy os proponemos unas cuantas joyitas de mar que cualquier genio de la lámpara debería concedernos al menos una vez en la vida. Rodeadas de arena y rocas, estos son algunos de los edenes que aguardan nuestra llegada, pacientemente.
Anse Source d’Argent – La Digue, Seychelles
La Playa de La Fuente de Plata nos recibe en sus arenas llenas de palmeras, en sus aguas Índicas y en sus gigantes rocas doradas, con unas tortugas enormes, que nos dan la bienvenida justo antes de entrar en este caleidoscopio de colores generado por el sol.
Matemwe Beach, Zanzíbar – Tanzania
En el nordeste de Zanzíbar podemos perdernos en este paraíso de arena blanca y aguas turquesas. Y si eres un amante del buceo, podrás sumergirte entre corales y miles de peces asombrosos cerca de la costa suajili.
Bora Bora – Tahití
Un clásico de película en el que la arena y el mar juegan un combinado perfecto. Este es uno de los destinos en los que podemos imaginarnos alejándonos de la rueda social para vivir tumbados en una hamaca, tomándonos un sabroso mojito.
Benagil – Portugal
Un poco más cerca, podemos aspirar a bañarnos en las aguas atlánticas del Algarve portugués donde se encuentra este enclave en el que se fusionan cuevas erosionadas por el mar, con arena y un sinfín de acantilados rocosos perfilados por el paso del tiempo.
Nosotros te proponemos una mínima expresión, pero son cientos los destinos asombrosos y muchísimos los tenemos en nuestro país. Así que te animamos a descubrir las playas con más encanto y compartirlas con nosotros, con un buen snack de Velarte por si te da hambre, entre tanta agua. 😉