Adiós a las vacaciones, vuelta al trabajo, a la rutina de septiembre y a la temida palabra “despertador”. Vuelta a retomar las tareas, a aquello que dejaste preparado y a lo que te ha estado esperando. La vuelta se puede hacer un poco cuesta arriba, pero siempre es un retorno con buen sabor de boca, con las pilas cargadas y con una visión más fresca y renovada.
Las vacaciones sientan como una bocanada de aire que siempre acaba viniendo mejor de lo esperado. Esos días en los que los planes fluyen uno detrás de otro, ya fueran previstos o no. Igual que tú, que te has ido dejando fluir poco a poco. Buena compañía, lugares que te han alegrado la vista, y vistas que te han alimentado el alma. Seguro que ahora mismo estás visualizando uno de esos momentos. Con todo esto en mente, es normal que septiembre se pueda poner algo peleón, y también que te cueste volver a la realidad, pero es importante encontrar en el día a día momentos para cuidarse y darse un poco de mimo.
Así, te proponemos una serie de cosas que puedes incorporar en tu vuelta al trabajo para mantener esa preciada calidad de vida después de las vacaciones.
- Orden. El caos está permitido en verano, la ruptura de la rutina y la vida sin horarios. Pero en la vuelta al trabajo es importante volver a centrar la mente y enfocarla. Para ello es necesario ordenar tu vida primero. Limpia la casa, deshaz las maletas y encuéntrate a gusto en tu hogar. Lo necesitarás despejado ya sea para trabajar desde casa o para volver a la oficina. Así todo fluirá mucho mejor.
- Buenos Aromas. Una vela, incienso o incluso flores. Elige lo que más vaya contigo. Son elementos que no sólo hacen el espacio más acogedor, sino que también mejoran el ambiente gracias a su esencia. Te relajará y a la vez te ayudará con los madrugones.
- Los desayunos. Comer sano es importante, pero también comer rico. En el equilibrio está el secreto. Come algo que te cuide por dentro y por fuera, y que al mismo tiempo te alegre el paladar. Tendrás una motivación más para levantarte de la cama y darte un capricho mañanero.
- “Automimos” post trabajo. Aire, agua o tierra. El elemento que sea posible. Tú eliges. Dale un “break” a la mente y deja que el cuerpo suelte las posibles tensiones acumuladas. Quizá volver a la rutina pueda resultar algo estresante. Por eso, un poco de yoga, correr, nadar o dar un paseo al aire libre pueden resultar de gran ayuda. A veces con sólo 15 minutos es suficiente, sin embargo, la sensación final siempre es positiva.
- Larga vida a los fines de semana. Vuelven a ser tus mayores aliados. Es vital volver a darles el valor que tienen. Tu nueva oportunidad de hacer pequeñas escapadas, planes de esos que saben a verano, e incluso, poniendo la vista en los próximos meses, está por delante la posibilidad de llevar a cabo apetecibles planes de invierno.
Con todo esto, seguro que la depresión postvacacional se irá haciendo cada vez más pequeña. Mantén la esperanza y la positividad. En Velarte sabemos que septiembre trae muchas oportunidades, entre ellas la de mostrar una mejor versión de ti mismo/a en tu entorno personal y laboral. Cuídate, date mimo, y déjate cuidar.